El core es un término que hace referencia al centro o al núcleo. Esta palabra se usa de manera frecuente para nombrar la zona muscular que envuelve toda la región abdominal, pélvica, lumbar y columna vertebral, es decir, el área que engloba el centro de gravedad del cuerpo.
Entre sus funciones destacan la estabilizadora y la motora, así como la de protección de los órganos. Por lo tanto, el ejercicio físico dedicado al core se lleva a cabo fundamentalmente por estos motivos:
- Al tratarse del centro de gravedad del cuerpo, el cual por tanto une el tren inferior con el tren superior, resulta imprescindible ejercitarlo para desarrollar estabilidad, coordinación y equilibrio. En el caso concreto del fútbol, el trabajo del core junto al de los isquiotibiales ayuda a realizar un buen golpeo del balón. Por otro lado, en un remate de cabeza con salto, tanto el core como los músculos de las piernas y el cuello serían los encargados de llevar a cabo esta acción.
- Mejora la respiración, ya que cuando se trabaja esta zona muscular, se consigue expulsar completamente el aire de los pulmones. De este modo se logra eliminar todo el aire pobre, dejando así más espacio para que entre aire limpio.
- Equilibra la postura, ya que, como se ha mencionado anteriormente, se trata del centro de gravedad en el que comienzan todos los movimientos. Además, teniendo un core fuerte se logra hacer más teniendo menos, es decir, estos movimientos serán más potentes.
- Por lo tanto, un buen trabajo del core ayuda a mantener una postura corporal correcta porque proporciona fuerza a las extremidades, reduciendo de esta manera también el riesgo de sufrir lesiones.
- Alivia el dolor de espalda, por lo que contra más fuerte esté el core, menos dolor se sufre en esta zona. Además, un trabajo del core controlado es capaz de aliviar el dolor lumbar.
- Ayuda a quemar la grasa de la zona media sin la necesidad de hacer los duros abdominales de gimnasio. Para ello se pueden utilizar ciertos accesorios deportivos y realizar algunas posturas de Pilates y de yoga.
- Protege los órganos internos, por lo que si el individuo realiza un buen trabajo del core, podrá desarrollar una fuerte musculatura que sirva de escudo para esta zona, la cual destaca por la ausencia de estructura ósea.